Ramaria fagetorum Maas Geest. ex Schild

Basidiocarpos coraloides, de 110–130 mm de altura y 70–90 mm de anchura, claramente ramificadas. Tronco basal de hasta 50 mm de alto y 30 mm de ancho en la parte superior, de forma obcónica a subcilíndrica, sin ramitas abortivas, blanco en la porción subterránea, y matizado con el color de las ramas en la parte emergente del sustrato. Ramas principales numerosas, de 8–10 mm de grosor en su inserción en el tronco, adelgazándose progresivamente hacia arriba y dividiéndose algunas veces de manera politómica, más o menos redondeadas en sección, lisas o ligeramente rugosas longitudinalmente. Inserción de las ramas  predominantemente aguda (en forma de V), aunque a veces aparecen esporádicamente inserciones en U. Terminaciones apicales con 2–4 puntas más o menos obtusas. Color: inicialmente rosa coral muy intenso, luego rosa carne o rosa salmón a medida que madura el basidiocarpo, volviéndose finalmente uniformemente crema ocráceo en la madurez completa. Ápices, al principio amarillos, se vuelven luego casi de igual color que las ramas.
Superficie externa no cambia al tacto ni con las contusiones. Contexto blanquecino, hasta rosada en el tronco, rosa claro en las ramas, marmorizado en húmedo, firme y fibroso en el pie, frágil en las ramas. Olor herbáceo con una nota química difícil de definir, pero no muy agradable; sabor suave.
Esporada: amarillo ocráceo. Basidiósporas de (7,8–) 8,0–10,1 (–10,5) × 3,3–4,2 µm, cilíndricas, ápice a menudo redondeado, a veces subelipsoide o subgiboso, apículo excéntrico y prominente, con ligera depresión suprahilar solo ocasionalmente marcada; a menudo con una gútula; pared de 0,2–0,3 µm de grosor, superficie desde sublisa hasta rugosa, ornamentada con verrugas bajas dispuestas irregularmente o unidas entre sí, a veces ordenadas en sentido longitudinal; cianófilas, débilmente reactivas al rojo congo, yodo-negativas, de color crema amarillento pálido en agua. Basidios de 40–65 × 7–10 µm, cilíndrico-claviformes, tetraspóricos, con esterigmas curvados de hasta 7 µm, sin fíbulas basales. Sistema hifal monomítico, formado por hifas generativas cilíndricas y septadas; en el subhimenio con artículos cortos y entrelazados, de 4–10 µm de ancho, hialinas; en las ramas, de hasta 10 (12) µm, hialinas, más o menos cilíndricas a algo infladas, rectas o flexuosas, en gran parte subparalelas; las más externas con pared delgada, las internas con pared de hasta 1 µm de grosor. En el tronco generalmente entrelazadas, de hasta 12 µm de ancho, hialinas a ligeramente amarillentas, con depósitos cristalinos polimorfos refringentes, ocasionales hifas ampuliformes en los septos (si presentes, de hasta 15 µm de ancho). Hifas trombopleurógenas presentes, con contenido amarillo ocráceo; no se observaron acantodendroides. Micelio basal monomítico, formado por hifas generativas habitualmente entrelazadas, de 2–5 µm de ancho, con pared de hasta 0,8 µm, parcialmente gelificada, hialina y lisa, con abundantes depósitos cristalinos polimorfos; hifas trombopleurógenas presentes y numerosas células globosas de color pardo. Fíbulas ausentes en todos los tejidos.

Sustrato: Suelo, bosques de frondosas.

Fuente de diagnosis: FUNGHI CLAVAROIDE IN ITALIA Volumen 2