Clavaria greletii Boud.

Basidiocarpos clavarioides, frágiles, de hasta 90 mm de altura y de 2 a 5 mm de ancho, llenos, simples y no ramificados, solitarios, ocasionalmente gregarios. Estípite cilíndrico, recto o curvo, de color ligeramente más intenso, pero a menudo apenas distinguible de la parte superior fértil, con residuos miceliales blanquecinos en la base. Clava subcilíndrica a claviforme, a veces comprimida, flexuosa. Ápice romo y redondeado en ejemplares jóvenes, a veces subagudo en ejemplares maduros. Himenóforo con superficie lisa, sutilmente arrugada, pruinosa, de color gris pizarra, gris parduzco, negruzco, tendiendo a desvanecerse a gris ceniza con la maduración y cuando esta seco. Contexto oscuro, del mismo color que la superficie exterior. Olor y sabor no apreciables. Esporada blanca. Basidiósporas (6,5) 7,0-9,0 (9,4) x (5,5) 6,2-8,0 (9,0) micras, subglobosas, a veces ampliamente elipsoidales, con un apículo pronunciado de forma tubular, de hasta 1,0 (1,5) micras de longitud, que a menudo contienen pequeñas gútulas, paredes delgadas y lisas raramente con verrugas esporádicas con forma de estrella, hialinas, congófilas, yodo-negativas. Basidios de 40-60 x 8-10 micras, cilíndricos-claviformes, tetrasporicos, con una fíbula basal ancha, esterigmas de hasta 7 micras de longitud. Sistema hifal monomítico. Hifas generativas de 3-14 (20) micras de ancho, algunas con largas articulaciones de hasta 80 micras, contienen un pigmento más o menos ocre, presenta septos secundarios. Fíbulas ausentes.

Sustrato: Terrestre, asociado a prados entre musgos y hierbas bajas, también entre la hojarasca en zonas boscosas.

Fuente de diagnosis: I FUNGHI CLAVAROIDE IN ITALIA  Volumen 1